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¿Qué es el VIH/SIDA?

Podrías pensar que el VIH y el SIDA son la misma cosa ya que se suele hablar de ambos en un solo respiro, ¡pero es incorrecto! Aunque están relacionados, el VIH y el SIDA son dos cosas completamente diferentes, y es importante conocer la diferencia:
  • El VIH es un virus que infecta a los seres humanos. Ataca el sistema inmunitario y hace que funcione mal y que te pongas muy enfermo. VIH significa virus de inmunodeficiencia humana, el virus que causa el SIDA.
  • El SIDA es un padecimiento médico grave que se compone de una variedad de enfermedades que ocurren porque el VIH interfiere con la capacidad de tu cuerpo para combatir otras infecciones. SIDA significa síndrome de inmunodeficiencia adquirida.

Cómo afecta el VIH a tu cuerpo

Un virus es un pequeño organismo infeccioso que solo se puede replicar dentro de las células vivas de otros organismos, en el caso del VIH, en las células inmunitarias humanas. Para entender cómo se relacionan la VIH y el SIDA tenemos que mirar más de cerca cómo funciona el sistema inmunitario. Tu sistema inmunitario es una red compleja de órganos, tejidos, y células llamadas glóbulos blancos. Los glóbulos blancos se forman en la médula ósea, migran a otras partes del sistema inmunitario como los ganglios linfáticos, bazo y timo, y flotan dentro del torrente sanguíneo. Los componentes del sistema inmunitario funcionan juntos para evitar que los gérmenes entren, crezcan y se multipliquen dentro del cuerpo.
Imagen que identifica los órganos afectados por el VIH
La piel es la primera línea de defensa contra los gérmenes y es una barrera muy efectiva contra las infecciones. Sin embargo, cuando las bacterias, virus u otros gérmenes pasan más allá de la piel, por ejemplo a través de una herida o de las membranas mucosas (las áreas húmedas y suaves justo dentro de tu nariz, boca, recto, vagina o pene), pueden entrar a la sangre. Si esto sucede, los glóbulos blancos los reconocen como extraños y lanzan un ataque en varios frentes que generalmente elimina a los invasores y evita una infección a gran escala.
Los diferentes tipos de glóbulos blancos son responsables de eliminar diferentes tipos de microorganismos. El grupo de glóbulos blancos responsables de eliminar virus y células tumorales se llama linfocitos. Hay varios tipos diferentes de linfocitos, todos con diferentes funciones. Los que son especialmente relevantes en la infección por el VIH son los linfocitos CD4 o células CD4. Estas células son un poco como policías, ya que patrullan el torrente sanguíneo e identifican cualquier virus o célula tumoral que no deberían estar allí. Si encuentran algo que les parece sospechoso, envían señales que activan otros linfocitos, incluyendo un grupo de linfocitos asesinos que, como su nombre indica, buscan y eliminan a los invasores.
Ilustración de células del sistema inmunitario
La razón por la que el VIH causa tantos problemas cuando se encuentra dentro de tu cuerpo es porque apunta a las células CD4, las infecta, se multiplica y las llena con cientos de nuevos virus. Los nuevos virus pueden brotar de las células infectadas, pero al final hay tantos que las células estallan y mueren. Cuando esto sucede, los virus recién formados se liberan al torrente sanguíneo donde pueden infectar otras células CD4 que no han sido infectadas.
Con el tiempo, la infección por VIH provoca una caída enorme en el número total de células CD4 de alrededor desde 1000 células por microlitro de sangre hasta menos de 200 por microlitro, lo que resulta en la inmunodeficiencia. En este momento, el sistema inmunitario es tan débil que ya no puede combatir a otros gérmenes cuando entran al organismo, lo que te vuelve extremadamente susceptible a infecciones y cánceres que normalmente no ocurrirían. La aparición de estas infecciones oportunistas es el inicio de lo que llamamos SIDA.

¿Cómo se diagnostica el VIH?

Solo puedes saber con certeza que tienes VIH si te haces la prueba. La prueba de VIH más común es una prueba de sangre. El médico tomará una pequeña muestra y la enviará al laboratorio para que sea analizada, y los resultados suelen llegar en pocos días. Algunas clínicas ofrecen pruebas en el lugar. Lo que se necesita hacer es dar una pequeña muestra de saliva, o una gota de sangre mediante un piquete con aguja, y ahí mismo te dan el resultado. Ambos tipos de prueba detectan si tienes anticuerpos de VIH o no. El problema es que generalmente toma varias semanas para que el sistema inmunitario produzca los anticuerpos del VIH después de la infección inicial, y en ocasiones tarda hasta 6 meses. Existen otras pruebas diagnósticas que pueden detectar la presencia del VIH antes, incluyendo una prueba del antígeno p24 del VIH y la prueba de amplificación de ácido nucleico, pero no se usan ampliamente en este momento.1

¿Cuáles son los síntomas del VIH/SIDA?

Si estás infectado con el VIH y no has tomado ningún tratamiento contra el VIH, puedes esperar tres etapas de enfermedad a medida que la infección avanza:
Línea de tiempo de la progresión de una infección por VIH
  1. La infección aguda ocurre poco después de que el VIH entra al organismo. El VIH infecta las células CD4 y se multiplica rápidamente. En una o dos semanas, la infección se establece y los signos y síntomas como fiebre, dolor de cabeza, fatiga, e inflamación de ganglios linfáticos hacen que mucha gente sienta que le está dando influenza. En este momento, el sistema inmunitario está trabajando a todo lo que da y combate la infección agresivamente, y típicamente, después de varias semanas, los síntomas parecidos a la influenza desaparecen y se comenzarán a producir los anticuerpos de VIH.
  2. La latencia clínica, como lo sugiere su nombre, es un tiempo cuando no hay síntomas. Durante este etapa, el sistema inmunitario y el VIH están en equilibrio y la infección está parcialmente controlada. Sin embargo, el VIH sigue multiplicándose lentamente, y a medida que pasa el tiempo, va matando las células CD4, lo que te vuelve cada vez más inmunodeficiente. El punto clave aquí es que durante este tiempo, la mayoría de las personas con VIH no se ven ni se sienten enfermas, y podrían incluso desconocer que están infectadas.
  3. El SIDA comienza cuando el sistema inmunitario se ha debilitado tanto que ya no puede protegerte de la infección por otros organismos y enfermedades. Se pueden experimentar alguno o todos los siguientes síntomas: pérdida acelerada de peso, sudoraciones nocturnas, fatiga extrema, ganglios linfáticos inflamados, diarrea crónica, úlceras en la boca, ano o genitales, neumonía, lesiones de color marrón o púrpura en la piel o boca, pérdida de memoria y depresión.
Los Centros para el Control de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) han publicado una lista de más de 20 enfermedades que definen el SIDA que suelen presentarse en las etapas posteriores de la infección por VIH y que se usan mundialmente para diagnosticar el SIDA para fines de vigilancia. Según la definición del CDC, si tienes infección de VIH, se considera que tienes SIDA si tu médico te ha diagnosticado con una de las enfermedades que definen al SIDA enlistadas.2 Por otra parte, el médico puede diagnosticar el SIDA con base en el recuento de células CD4, salvo en los niños pequeños o bebés. Si tienes 6 años de edad o más, tienes SIDA si tu recuento de células CD4 es menor a 200 células por microlitro, o si tus células CD4 son menos del 14% de tu total de linfocitos.2 La susceptibilidad a las enfermedades que definen el SIDA está relacionada con el recuento de células CD4, y estas suelen iniciar cuando el recuento de CD4 ha bajado a unas 500 células por microlitro de sangre.
Algunas de las enfermedades más comunes que definen el SIDA que pueden causar síntomas de SIDA se muestran en la tabla siguiente.3
Células CD4 cells por microlitro de sangreEnfermedades definitorias del SIDA
Cerca de 500Infecciones por hongos (Candida): Las primeras infecciones oportunistas que probablemente se presenten si tienes VIH son infecciones menores por hongos causadas por el crecimiento de Candida, el hongo que causa la dermatitis del pañal en los bebés. Las infecciones por Candida suelen ocurrir en la boca y garganta (candidiasis bucal), vías aéreas y pulmones, o en la vagina (candidiasis vaginal). Este hongo generalmente forma parches blancos en las encías, lengua o recubrimiento de la boca, y puede hacer que tragar se vuelva tan doloroso que pierdas el apetito. Una infección vaginal causará comezón y ardor, dolor y enrojecimiento, acompañados de secreción blancuzca y espesa.
500 a 200Sarcoma de Kaposi: el sarcoma de Kaposi es un tumor causado por un virus de herpes humano. El tumor suele aparecer como lesiones de color púrpura en la piel de las piernas o cara, o adentro de la boca, y puede diseminarse a otras partes del cuerpo sin que te des cuenta. Si el cáncer llega a los intestinos o pulmones, puede causar sangrado o dificultad respiratoria que puede poner en riesgo la vida.
200 a 100Neumonía por Pneumocystis jiroveci: la neumonía por Pneumocystis jiroveci es un tipo de neumonía que afecta gravemente los pulmones y es la enfermedad oportunista más común en las personas con SIDA. Los signos y síntomas pueden incluir dificultad respiratoria, fiebre, tos seca, y dolor en el pecho. Suele tomar varias semanas o meses en desarrollarse, pero puede poner en peligro la vida si no se trata.
100 a 50Cytomegalovirus: el citomegalovirus está en todas partes y se cree que la mayoría de las personas en el mundo han estado expuestas a él, pero en general no lo notaron. No obstante, como sucede con el VIH, una vez contraído el virus, será de por vida. Si has sido infectado con VIH y tienes recuentos bajos de CD4, no sorprendería si adquirieras una infección de citomegalovirus intestinal o en los ojos (retinitis por citomegalovirus) que podría llevar a la ceguera si no recibes tratamiento.
menos de 50Complejo Mycobacterium avium: el complejo Mycobacterium avium existe en todas partes en el ambiente y puede infectar los pulmones e intestinos de las personas con inmunodeficiencia grave. Puede ser mortal si se disemina a otras partes del cuerpo.

¿Cómo te da VIH?

La forma más común de contraer VIH es tener relaciones sexuales con una persona infectada con VIH.
  • El VIH pasa de una persona a otra cuando ciertos líquidos corporales (sangre, semen, secreciones vaginales, líquidos del recto, y leche materna) de una persona infectada con VIH entran en contacto con una membrana mucosa en la nariz, boca, recto, vagina o pene de una persona no infectada. El sexo vaginal, anal u oral son medios propicios para que el VIH se transmita de una persona a otra.
La segunda forma más común de contagiarse de VIH es por inyección directa del VIH en el cuerpo.
  • Esto sucede más comúnmente cuando las personas que usan drogas por inyección comparten agujas, jeringas u otro equipo de inyección que está contaminado con VIH.
Imagen de una aguja
Vale la pena saber que el VIH no es altamente contagioso, es decir que no se pasa de una persona a otra muy fácilmente. No se transmite por el aire, y dado que no vive mucho tiempo fuera del cuerpo humano, no lo puedes adquirir simplemente por estar cerca de una persona infectada con VIH, No se transmite por contacto, abrazos, estornudos o tos, ni por comer o beber de utensilios comunes. No se transmite por agua, saliva, lágrimas, ni sudor, ni por usar un bebedero o sentarse en un escusado, y no se transmite por insectos, incluyendo mosquitos o garrapatas.

¿Qué tan probable es que te dé VIH?

Cerca de 35 millones de personas actualmente viven con VIH en todo el mundo. Casi la mitad son mujeres y más de 3 millones son niños.4 Todos los días 6000 personas se infectan de VIH, lo que significa que más de 2 millones de personas nuevas se infectan por año.4
Mapa mundial que muestra la prevalencia del VIH/SIDA
Tus posibilidades de contagiarte de VIH dependen de muchos factores. Aunque no siempre es el caso, puede suceder la primera vez que tengas relaciones con alguien que esté infectado, o la primera vez que te inyectes drogas con una aguja contaminada. Hay situaciones que aumentan la probabilidad de que te suceda, estas incluyen:
  • Tu pareja sexual infectada con VIH tiene otra enfermedad de transmisión sexual como herpes, hepatitis o tuberculosis.
  • Si tu pareja sexual infectada con VIH tiene cantidades particularmente altas de VIH circulando en su sangre (una carga viral alta).
  • Si frecuentemente tienes relaciones sexuales sin protección cuando sabes que una pareja está infectada.
  • Si con frecuencia tienes relaciones sexuales anales o vaginales sin protección con varias parejas cuando no estás seguro si tienen infección con VIH o no.

Cómo evitar infectarse con el VIH

Para evitar el contagio con el VIH, se debe evitar que cualquier líquido corporal contaminado entre al cuerpo por la nariz o boca, vagina, ano, pene o rasgaduras de la piel. Esto se puede lograr practicando sexo seguro o utilizando drogas de forma segura, lo que implica:
  • siempre usar condón
  • someterse a pruebas regularmente; esto es obligatorio si tienes relaciones sexuales con alguien que sabes que tiene VIH o si te preocupa que pudieras haber sido expuesto al VIH, y
  • jamás compartir agujas, algodón, instrumentos para cocinar, cucharas para cocaína, o goteros si usas drogas.
Hay otras formas como se puede contagiar el VIH, aunque de forma poco común. Es posible infectarse por medio de una lesión por punción con aguja o transfusión de sangre, o por mordedura de una persona infectada con VIH. El VIH también se puede transmitir de una madre infectada a un bebé durante el embarazo, parto o alumbramiento, o por leche materna, pero con el tratamiento médico adecuado durante el embarazo, esto también es raro.

¿Cómo se trata el VIH/SIDA?

La terapia antirretroviral (TARV) es la medicina que se usa para tratar la infección de VIH. Es una combinación de tres medicamentos diferentes que suele tomarse como una sola tableta y que se debe tomar todos los días para obtener el máximo beneficio. La TARV se recomienda para todas las personas infectadas con VIH. Aunque no es una cura, si tienes VIH te permitirá vivir una vida más larga y saludable, y reduce la posibilidad de que transmitas el virus a alguien más.
Las medicinas contra el VIH funcionan al evitar que se multiplique el VIH, lo que disminuye la cantidad de virus en el torrente sanguíneo (carga viral). Aunque la medicina no elimina el VIH totalmente, le da a las células CD4 la posibilidad de recuperarse para que puedan combatir infecciones oportunistas y el cáncer. Si no tomas TARV, es probable que mueras en los 12 años siguientes a la infección inicial. Por otra parte, si tomas TARV, puedes tener una expectativa de vida igual o incluso mayor que la población en general.
Si das positivo para un infección por VIH, el médico tomará una historia clínica, realizará una exploración física y pedirá más pruebas para averiguar cómo el VIH está afectando tu sistema inmunitario. Hay más de 20 medicamentos y varias combinaciones de TARV que pueden ser adecuadas, según tus necesidades individuales. Las tres pruebas importantes que ayudan al médico a decidir qué medicinas te funcionarán mejor son:
  • Análisis de CD4 que mide tu recuento de células CD4.
  • Pruebas de carga viral que miden la cantidad de virus que hay en tu sangre, y
  • Pruebas de resistencia a medicamentos para averiguar si el VIH con el que estás infectado es resistente a cualquiera de los medicamentos anti-VIH que están disponibles.
Dado que se sabe que las medicinas para el VIH interactúan negativamente con algunas otras medicinas, la elección de la terapia también dependerá de qué más estés tomando. Posteriormente, tu medicina para el VIH se puede cambiar si estás presentando efectos secundarios desagradables, o si tu VIH se vuelve resistente a la medicina.

Considera lo siguiente:

  • Podrías ser una de las millones de personas que usan un lubricante durante las relaciones sexuales. Si estás usando un condón de látex, puedes hacer más segura la relación si usas un lubricante con base de agua en lugar de un lubricante con base de aceite. ¿Por qué? Los lubricantes con base de aceite, como la vaselina, debilitan el látex y hacen que sea más fácil que el condón se rompa. Entonces, solo elige lubricantes con base de aceite si estás usando condón de poliuretano.
  • Podrías pensar que olvidar tomar tus medicamentos contra el VIH de vez en cuando no es muy importante, ¡pero sí lo es! ¿Por qué? El VIH se puede multiplicar muy rápidamente, y en ocasiones muta, lo que significa que evoluciona en una forma nueva. Olvidar tomar tu medicina para el VIH aumenta la posibilidad de que tu VIH se multiplique y mute en una forma resistente a los fármacos. Si esto sucede, tu medicina para el VIH dejará de funcionar bien y el VIH hará más daño a tu sistema inmunitario.

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